Más involucración, menos negociación
![]() |
Angelina Jolie en Naciones Unidas |
En el siglo XXI, en la era
de la tecnología, de la postmodernidad, de la innovación, de la igualdad
social… cuando por fin parece que toda la humanidad comparte un mismo concepto
de lo justo e injusto, de lo bueno y de lo malo, del bien y del mal, de lo
correcto e incorrecto,… cuando los ciudadanos del mundo somos cada vez más
participes en las decisiones políticas, mas críticos con las circunstancias
sociales y las injusticias… todavía situaciones como la desigualdad de género,
el maltrato, la violencia, en definitiva, las violaciones de los derechos de la
mujer de las que muchas mujeres son victimas en sus países forman parte de la
actual realidad internacional. ¿Cómo es
posible que en una sociedad tan adelantada tanto moral, intelectual y
racionalmente tengamos que seguir siendo testigos de injusticias humanitarias
que muchas mujeres y niños sufren en sus países? Hablamos de progreso, de
cultura, de una única clase social, de integración, de tolerancia… y sin
embargo, no somos capaces de presionar a los políticos y a las fuerzas
internacionales de los países del primer mundo para que pongan fin a dichas
situaciones inhumanas, indignas y totalmente lamentables.
¿Quiénes están realmente
alzando la voz denunciando dichas situaciones injustas? Como muchos saben, una
de mis grandes inquietudes es la Moda, pero no la moda de la que ahora se habla
donde cualquiera es conocedor de las tendencias y diseños de grandes
profesionales plasmándolo en un blog o siendo una celebritie que presume de
llevar “lo último”. No, a esa moda no me refiero, me refiero a la Moda con
mayúsculas, aquella que crea arte y que es generada y vivida por los
profesionales que se dedican a ello, incluyendo a las modelos que se levantan a
altas horas de la madrugada para desfilar y que están en contacto con la moda
las 24 horas del día, a los diseñadores que nacen en la cuna de las grandes
ciudades, y sobre todo, a la moda que se implica en situaciones humanitarias y
nos transmite desde su humilde sillón en primera fila del gran desfile de la
vida, su perspectiva de las injusticias humanitarias de las que es conocedora y
testigo de primera mano. Siendo los protagonistas de la Moda, sus promotores
tanto hombres como mujeres los que aprovechando su contacto y poder de
influencia internacional a través de los diseñadores, de sus propias modelos o
simplemente de sus inquietudes sociales, los que están haciendo eco de dichas
situaciones, y a la vez, una gran labor humanitaria.
Entre ellos, destaco a mujeres
del primer mundo, con poder, con decisión, con una personalidad fuerte y con
brillantes carreras, que han podido ser testigo directo de las vejaciones e
injusticias que muchas mujeres sufren en sus países, tal vez, viajando o
conociendo a personas de esos países gracias a su profesión, o simplemente
denunciando dichas situaciones públicamente aprovechando su influencia en los
medios de comunicación, bien por ser directoras de grandes revistas de moda,
bien por ser periodistas con prestigio o por ser famosas internacionalmente
conocidas. Son ellas y todas las personas que hay detrás apoyando su
iniciativa, y no los políticos, las que están siendo las embajadoras de las
situaciones lamentables que muchas mujeres viven en sus países, y gracias a
ellas apoyadas por el verdadero mundo de la moda, estamos siendo testigos de
dichas injusticias. La Moda a la que me refiero, es pues, aquella que además de
generar tendencias textiles, también tienen como objetivo generar tendencias promovidas
por preocupaciones humanitarias y sociales.
Sentarme una tarde a leer
una revista de Moda y leer varios artículos denunciando dichas situaciones
discriminatorias e indignas de manera tan detallada y objetiva, es cuando me
doy cuenta de la gran labor humanitaria que ejerce este campo en el mundo, y del
papel tan relevante que por su influencia internacional tiene con la humanidad.
Esa es la verdadera moda, la Moda científica que merece la pena leer, escuchar
y sobre todo, respetar, porque es uno de los grandes motores que actualmente se
involucra en dichas situaciones lamentables e intolerables, dejando a un lado
las negociaciones políticas promovidas por el capitalismo.
Este post se lo quiero
dedicar a grandes revistas de moda como Vogue, Glamour, Elle, en general todas
la que se dedican a escribir sobre la Moda en mayúsculas, y a sus directoras y
redactoras que a través de su posición profesional y social aportan su granito
de arena haciendo una gran labor humanitaria denunciando dichas situaciones,
entre otras cosas, relatando e entrevistando a mujeres que han vivido en primera
persona grandes injusticias. También reconociendo y haciendo pública la gran labor
de otras periodistas, famosas, modelos, ejecutivas… como internacionalmente
tenemos entre otras, a Anna Wintour, Angelina Jolie y nacionalmente a Julia Otero, Nativel
Preciado… que luchan contra estas injusticias. Y sobre todo, transmitiendo cada
mes a todas sus lectoras las situaciones deprimentes que otras mujeres viven actualmente en sus países.
Os recomiendo leer el gran
artículo que escribe Marta Rivera de la Cruz titulado ¿Por qué no las defendemos? En la página 162 del número de
septiembre 2014 de la revista Glamour de España. También en el mismo número de la misma revista
en la página 122 tenéis otro artículo relacionado con el tema titulado Angelina Jolie y sus ángeles de la guarda,
redactado por Mariane Pearl, Elena R. Ballano y Elena Mandecen. Este un gran
ejemplo de la labor humanitaria que hace la Moda en nuestra sociedad y de la
que he hecho referencia a lo largo de este post up.
Os dejo un link de un video sobre Angelina Jolie cuando critica al Consejo de Seguridad por su inacción ante las violaciones de guerra:
Muchas gracias por todo, un abrazo.
Leticia.
Comentarios
Publicar un comentario